Novedades

7 novelas que todo arquitecto debería leer


Los grandes arquitectos son como grandes escritores. Nuestra habilidad para observar el mundo que nos rodea hasta el más pequeño detalle -para luego hacer las conexiones más notables-, ha dado a la humanidad grandes historias y experiencias, ya sea a través de espacios imaginados o reales. Como dice Charles Eames: "Eventualmente todo se conecta: personas, ideas, objetos. La calidad de las conexiones es la clave de la calidad en sí misma".



Como arquitectos, tenemos una sucesión casi infinita de conexiones para hacer; los materiales, la geografía, el tiempo, la gente, las experiencias y nuestras propias creencias. Todo se reúne en el diseño de un espacio. Las novelas son, por lo tanto, una gran manera de recordar todas las posibilidades creativas que la arquitectura sostiene, animándonos a soñar. Cada una de estas 7 novelas no-arquitectónicas tiene cualidades que podrían abrir el mundo arquitectónico (además de entregarte un agradable momento de lectura para tus tiempos libres). ¡A disfrutar!


1. Zen y el Arte de la Mantención de Motocicletas por Robert M. Pirsig
Después de un viaje de motocicleta entre un padre y un hijo a través del noroeste americano, la novela relata el descubrimiento filosófico del verdadero concepto de la calidad; algo con lo que los arquitectos están luchando constantemente. ¿Se alcanza la calidad a través de la percepción, o la racionalidad? ¿Surge de las propiedades materiales, de la forma, del diseñador? Pirsig comienza a sacar sus propias conclusiones sobre la calidad, su necesidad de una identificación personal, y la relación entre el creador y la creación. En otras palabras, la calidad no puede ser falsificada, así como la verdadera inversión no puede ser falsificada. "Zen y el Arte de la Mantención de Motocicletas" no sólo te lleva a lo largo de una emocionante historia; te hará pensar profundamente en lo que la calidad significa realmente para ti y tu arquitectura.

2. El Dios de las Cosas Pequeñas por Arundhati Roy
Roy presta mucha atención (como su título sugiere) a las pequeñas cosas de la vida, pero lo más importante, a cómo estas se conectan con las cosas más grandes. Esta comprensión de la profunda relación entre los detalles y el contexto está seguramente influenciada por su educación en la Escuela de Planificación y Arquitectura en Delhi, contribuyendo también a sus decisiones sobre la estructura y el espacio en la novela. Como Roy explica: "Las historias que más te gustan son las historias que ya conoces... estructuralmente, como arquitecto, no comienzas a diseñar una casa con la entrada y terminas con la salida. Existe una estructura de capas, narrativa, y eso es un reto en sí mismo". Este pensamiento cíclico resulta en una trama texturizada y sana, que a través de palabras pretende materializar lo intangible, creando un lenguaje propio para procesar el mundo. Esperamos que te inspire a hacer lo mismo.


3. El Principito por Antoine de Saint-Exupéry
"El Principito" es conocido por mirar más allá del mundo a primera vista; un hecho que se hace evidente en las primeras páginas, donde "los adultos" confunden el dibujo de "una boa digiriendo un elefante" con un sombrero. Saint-Exupéry te lleva de vuelta a la belleza y la maravilla de ser un niño, y el poder de emocionarte con ciertas experiencias. Es una lectura corta en comparación con el resto de los libros de esta lista, pero tiene éxito en recordarnos lo que es realmente importante para las personas, las relaciones, una mente saludable y lo que deberíamos hacer para contribuir a potenciar todo esto. "El Principito" nos anima a "pensar fuera de la caja", o más bien, a "pensar fuera del sombrero", y a re-encantar nuestra fascinación con el mundo que a veces se diluye con la edad.

4. Austerlitz por W. G. Sebald
Sebald construye una historia que gira en torno a la creación de la identidad a través de la memoria; historia que nace de la relación entre Austerlitz y el narrador y que surge de sus intereses comunes relacionados con la historia y la arquitectura. Por lo tanto, no son sólo las descripciones de la memoria, el lugar y la identidad las que se mueven y se complejizan, sino también las descripciones de espacios arquitectónicos con imágenes e ilustraciones. La novela es un recorrido por elementos de la historia arquitectónica y una historia personal, por lo que es informativa y atractiva a la vez.


5. El Manantial por Ayn Rand
El ideal de la 'persona moral' de Rand se manifiesta en su representación del arquitecto Howard Roark, un hombre que va más allá del alcance de la corrupción. Es una novela que lucha por la integridad y la honestidad, y contra la conformidad y el prestigio. Ya sea que uno esté de acuerdo con la filosofía moral de Rand o no, "El Manantial" te obliga a pensar profundamente acerca de la honestidad de tu práctica y a comunicar tus creencias sobre lo que piensas que es importante en este mundo, a través de la arquitectura. Se cuestiona todo acerca de la historia, la autoridad y la tradición, a favor de la autenticidad intransigente.

6. El Paciente Inglés por Michael Ondaatje
"Una rosa es una rosa es una rosa ..." Las capas que se acumulan sobre una rosa, un objeto, o un lugar en el tiempo, trabajando para dar forma a algo nuevo, son centrales en la novela de Ondaatje, donde las capas de tiempo, lugar, historia y cultura se deslizan entre ellas con inmensa fluidez. Siguiendo la narración de un hombre cuya identidad e historia es cuestionable, la relación entre espacio, memoria y tiempo es innegable. Estos recuerdos encapsulados dentro de la arquitectura no sólo son bellos, sino también provocadores desde una perspectiva arquitectónica. ¿Cómo usamos la historia y el tiempo para dar forma? ¿Cómo encaja la cartografía y organización del espacio, las naciones, las fronteras y las etiquetas en la arquitectura?


7. El Aleph y Otras Historias por Jorge Luis Borges
Imaginando espacios inimaginables, como el infinito experimentado en un punto, Borges empuja los límites de lo que podría ser el espacio y, por consiguiente, la arquitectura. ¿Es posible crear la experiencia de un espacio sin fin? ¿De un espacio cambiante? Los mundos existentes dentro de "El Aleph" retuercen la realidad, tal vez más allá de lo posible, pero se abren a la evolución potencial de nuestras experiencias y percepciones del espacio.



Fuente: Archdaily

No hay comentarios.